46ª de Las Cien Mejores Poesías de la Lengua Castellana
Selección de Marcelino Menéndez y Pelayo (1856–1912)
<< Página Anterior  •  Índice  •  Página Siguiente >>
46

Soneto

Lope de Vega
(1562–1635)

Pastor, que con tus silbos amorosos
Me despertaste del profundo sueño;
Tú, que hiciste cayado dese leño
En que tiendes los brazos poderosos;

Vuelve los ojos a mi fe piadosos,
Pues te confieso por mi amor y dueño,
Y la palabra de seguirte empeño
Tus dulces silbos y tus pies hermosos.

Oye, Pastor que por amores mueres,
No te espante el rigor de mis pecados,
Pues tan amigo de rendidos eres;

Espera pues, y escucha mis cuidados;
Pero ¿cómo te digo que me esperes,
Si estás para esperar los pies clavados?


 
<< Página Anterior  •  Índice  •  Página Siguiente >>
 
Biografía de Lope Félix de Vega Carpio